miércoles, 24 de julio de 2013

Capítulo 15.

Narrado por Dani.

Me levanto con el pitido del despertador a las 10, la verdad es que no quedé en nada con Gin y eso me preocupa un poco, ¿y si se le ha olvidado?.
Pero cuando voy para el baño a lavarme la cara veo un sobre en el que pone Dani. Lo abro y dentro veo una nota. Se me dibuja una sonrisa en la cara.
"Buenos días guaperas, ¿has dormido bien?, espero que si porque nos espera un día movidito. Bueno como ya sabes yo soy una chica difícil, así que las citas conmigo tampoco son fáciles.
Ponte guapo pero informal, te espero a las 11.30 en el hall."
Algo difícil. Esta chica me da miedo, pero por otra parte también me impacienta me apetece mucho verla y eso que la vi ayer. No me había pasado esto nunca con una chica, ¿me estaré enamorando? Espero que no.
Samuel, con el que comparto habitación se despierta al oírme buscar algo formal pero informal.
- ¿Qué hace despierto a estas horas?
- Voy a salir con Gin.
- Me cae bien es muy simpática, me gusta mucho más que la estirada de Belén.
- Oye Sam, ¿tu sabes que tipo de ropa hay que ponerse que vaya formal pero informal?
- Bueno no sé, puedo intentar ayudarte, creo que tantas tardes con Ángela de compras servirán de algo.
Entre Sam y yo elegimos un jersey de pico azul marino, con el que me pongo debajo una camiseta blanca, vaqueros y deportivas y de abrigo mi trenca azul por la cintura que es abrigada para el frío que hace aquí.
Me bajo al hall a las 11.30 pero allí no hay nadie, y me empiezo a preocupar. Pero de repente una chica morena con el pelo rizado de ojos verdes me llama, es Cris, la amiga de Gin.
- Hola Dani, Gin me ha dicho que te de esto, pasarlo bien.- y se va, no me da tiempo ni a darle las gracias.
Miro el sobre y lo abro, esta bastante abultado.
"Hola otra vez, te has asustado al no verme ¿a qué si?, bueno para encontrarme vas a tener que andar un poco, primero tienes que ir a mi cafetería favorita y pide un café a tu nombre ahí encontrarás la siguiente pista, suerte."
Dentro del sobre hay un mapa de Londres en el que hay un post it en el que pone "por si te hace falta para las siguientes pistas."
Esta chica es un caso, bueno, cuanto antes empiece antes la veré, así que como ponía en la nota me voy a Starbucks su cafetería favorita.
Tardo 15 minutos en llegar al centro de Londres y otros diez en ir al Starbucks.
- Hola, un chica ha dejado un café encargado para mi esta mañana, me llamo Dani.
- Ah si, lo ha dejado una chica muy guapa, Gin me ha dicho que se llamaba, me ha dicho que le diera el café a un chico moreno y muy guapo supongo que serás tu.
- Si soy yo.
- Es gracioso siempre lee el nombre de nuestras tarjetas y nos llama por nuestro nombre, es de las pocas que lo hacen.
- Si, la verdad es que es una chica muy especial.
- Tienes suerte de tener una novia así, toma aquí esta, un frapuccino y la nota que me ha dejado, que tengas un buen día.- dice guiñandome un ojo.
- Lo mismo digo... Carla.- digo tras mirarle el nombre que llevaba en su tarjeta y esta me sonríe.
Mientras me tomo el frapuccino, mi bebida favorita de allí, leo la nota que me ha dejado Gin.
"Hola hola, supongo que ya te estarás tomando tu frapuccino, sabía que era tu favorito. Habrás conocido a Carla, es un encanto. Bueno, para que me vayas conociendo mejor, me encantan los dulces, soy una golosa, así que en el mapa que te he dejado busca la avenida más cercana en el mapa, ahí hay una tienda de chuches, encontrarás la siguiente pista en mi chuchería favorita. Ánimo que te queda poco."
Saco el mapa y miro la avenida más cercana, y me dirijo hacia allí. Llego a la tienda que se llama Candy que es enorme y hay todo tipo de chuches. Pero en una de las miles cajas aprecio un notita rosa, en la caja de los regalices rojos.
"Ya has descubierto mi chuche favorita, es el regaliz, me pierde. Bueno pues te dejo ya en paz que seguro que me odiarás, sólo tienes que ir a un pequeño bar en el que en una cesta esta la comida que he preparado en la cesta estará la nota que te dirá donde estoy. Por cierto pídele a la chica que esta en la caja una bolsa de chuches que he comprado esta mañana, dile que vas de mi parte. Ya queda menos."
Madre mía esta chica me va a matar hoy, miro en el mapa y veo el bar más cercano, esta a dos calles no muy lejos.
Cuando llego veo que el bar no es muy grande y supongo que es ese, paso y me encuentro con que los dueños, de unos cincuenta años, están hablando español.
- Hola, vengo a por una cesta que ha dejado aquí una chica esta mañana.
- Anda tu eres Dani ¿no?, Gin me ha hablado mucho de ti. Yo soy una amiga suya de España, esta mañana se ha venido a cocinar mientras tu recorrías Londres, toma aquí tienes la cesta y tu nota.
- Gracias, supongo que nos veremos más veces.
- Seguro que Gin te trae por aquí alguna vez, pasarlo bien.
Con que Gin le ha hablado mucho de mi, eso es buena señal. Bueno saco la última nota de la cesta.
"Que listo eres, ya lo has encontrado todo, ahora si que si, te espero en el parque que hay a tres manzanas de donde estas, ahora solo falta que m encuentres. Tengo ganas de verte, corre."
Menos mal que ya he terminado, estoy derrotado, me dirijo al parque que me ha dicho. Pero a saber porque esta es capaz de esconderse en algún sitio todavía en el parque. Pero a lo lejos veo a una chica de pelo rizado, sentada en una manta en el césped, con un suéter azul tan guapa como siempre. Eso si la voy a matar por hacerme dar tanta vuelta.
- Pensaba que te habías perdido como tardabas tanto.
- Te voy a matar, me has hecho dar mil vueltas.
- Te he dicho que conmigo las cosas no son fáciles.
- Bueno ¿comemos? Me muero de hambre.
- Claro, supongo que habrás conocido a mi amiga, ella me ha ayudado a hacer la comida y no se tu pero yo echo mucho de menos a comida de España.- dice y saca de la cesta dos bocadillos de tortilla de patata.
- Tortilla de patata, desde que estoy en Londres no la he probado.
- Pues vamos a comer.
De postre Gin había preparado unas magdalenas caseras con su amiga que se llamaba Sandra, me contó que era muy amiga de su madre y que cuando se vino a Londres se acordó que ellos vinieron unos años antes a formar un restaurante de comida española aquí.
- Estaba todo buenísimo, se te da bien la cocina.
- Gracias, cocinare más veces entonces.
- ¿Quieres las chuches que has comprado esta mañana?
- Por supuesto.- dice relamiendose.
- Oye Gin, ¿tienes frío?- llevaba con los brazos cruzados bastante rato y tiritando un poco.
- Pues sí, un poco la verdad pensaba que con el jersey me sobraría.
- ¿Quieres mi chaqueta?
- No no, déjalo.
Pero no le hago caso me quito la chaqueta y se la pongo, ella se la abrocha y se cruza de brazos.
- ¿Bueno nos vamos ya a la residencia?
- ¿Ya, tan pronto te quieres ir?
- No, que no se ¿tienes algo más planeado para hacer?
- No sabes la tarde que te espera guapito.
Y cuando termina de decir esto me besa, me da ese beso que llevaba toda la mañana esperando y que no sería el primero de toda la tarde.

jueves, 18 de julio de 2013

Capítulo 14.

Narrado por Gin.

Empieza el lunes y como siempre Dani se sienta detrás de mi o a mi lado, pero siempre cerca, le he preguntado por que lo hace y dice que le gusta tenerme a su lado y sentir cerca mi olor a vainilla.

La semana pasa rápido, y no nos vemos casi, durante la semana me vuelco en estudiar para poder salir el fin de semana me viene bien compartir habitación con Julia porque es muy estudiosa y se organiza muy bien, además como vamos a la misma clase estudiamos juntas los exámenes, es una suerte tenerla.

El viernes antes de la última clase estoy guardando mis cosas en la taquilla y siento que me acarician el culo, me giro de una con la mano preparada para dar un bofetón pero Dani me la coge.
- Eres un cerdo.
- Pero se que te encanta.
- Estúpido.
- Guapa.
- Idiota.
- Preciosa.
- Conmigo esos juegos no te funcionan.
- ¿Cómo que no? Si te tengo loquita por mis huesos.
- Imbécil.
- Tú imbécil.
- Tu más.
- No, no me refiero a que soy tú imbécil, sólo tuyo.
- No lo tengo tan claro.
Suena el timbre.
- Tenlo claro, me encantas.
- No cuela.
Me siento en mi sitio y como no el detrás de mi. Empieza a jugar con mi pelo, me giro y hace como que atiende al profesor de sociales. Luego me tira del tirante del sujetador, me giro enfadada y se hace el loco. Oigo que susurra mi nombre y me pasa una nota. 
- Esta noche me paso a por ti a las nueve, estate preparada.
- ¿Me estás pidiendo una cita?
- Puede.
- ¿Cómo estas tan seguro de que me voy a ir contigo?
- Se que lo vas a hacer, no puedes resistirte.
- Creído.
- Te espero, preciosa.
Y al leer esto me sale una sonrisa me giro y me guiña un ojo. Este chico es único, pero esta claro que esta noche me voy a ir con el.
La tarde del viernes la paso junto a las chicas contándoles todo y aconsejándonos unas a las otras, en la habitación de Helena y Cris, en la que tenemos helados, chuches, pizza lo que se puede llamar una tarde de chicas y luego vimos una película romántica, que no podía faltar en una tarde así.
Llegan las ocho.
- Bueno chicas yo me voy a prepararme, porque ahora me voy con Dani.
- Me voy contigo, como tu asesora de imagen tengo que aconsejarte.- dice Ángela.
- ¿Desde cuándo eres tu mi asesora de imagen?
- Desde ahora mismo, vamos no hay tiempo que perder.
Llegamos a mi habitación, me doy una ducha y Ángela y yo decidimos que lo mejor es una sudadera azul marino de Abercrombie&Fitch mi marca favorita, vaqueros pitillo y mis converse, con eso iré cómoda y abrigada.
Para el pelo Ángela como siempre me quiere hacer uno de sus maravillosos peinados, pero decido hacerme una trenza al lado que es lo más cómodo.

Dani llega puntual, Ángela nos despide y se va a su habitación.
- Hola.- le digo con una sonrisa.
- Hola, que guapa estas.
- Tu también.- va con unas vaqueros y una sudadera de Gap, a el le quedo todo bien.- ¿Bueno y a donde vamos hoy señor sorpresas?
- A la bolera, hay una por aquí a las afueras.
- No soy muy buena que digamos.
- Tranquila yo te enseño.
Llegamos a la bolera, es muy oscura y la iluminan neones de todos los colores. Nos dan las zapatillas que hay que ponerse especiales y empezamos a jugar, Dani mete casi todo plenos, pero yo tiro como máximo tres bolos.
- Esto es muy complicado para mi.- digo sentándose en una silla.
- Ven, anda yo te enseño. Coge una bola.
- Hasta ahí llego...
- Ahora apunta a donde quieres tirar, o sea al bolo que más sobresale. 
Mientras dice esto esta detrás de mi sujetándome por la cintura y tiene su brazo encima del mío pra ayudarme a tirar.
- Y ahora que ya has apuntado, tira.
La bola va lenta, pero tira todos los bolos.
- ¡Pleno!- chillo, abrazando a Dani.
- Muy bien, aprendes rápido.
- Tengo un buen maestro.- cuando digo esto el sonríe y me da un beso.
Terminamos la partida y el gana, como era de suponer. Nos vamos a la zona de restaurante que tiene la bolera y pedimos una pizza para los dos, cuando terminamos Dani pide la cuenta y nos vamos.
Cuando estamos llegando a la residencia me doy cuenta de una cosa.
- Mierda, tenía que pagar yo, me lo prometiste.
- No pasa nada.
- Mañana pienso yo el plan e invito yo.
- ¿Es una cita?- dice sonriendo.
- Puede. 
- ¿Y cómo estas tan segura de que me voy a ir contigo? -dice imitándome y cogiéndole de la cintura.
- Porque te encanto y no te puedes resistir a mi.- digo acercándome a su boca y le beso.
- Tienes razón, me encantas.- y me vuelve a besar.
Me acompaña a la puerta de mi habitación y allí nos despedimos.
- Además te tengo que recompensar por lo de la semana pasada.
- ¿Recompensar? ¿Qué tipo de recompensa?
- Ah, es una sorpresa mañana sabrás más cosas, buenas noches.
- Buenas noches, Gin.- y me despide con un beso.

Narrado por Dani.

Una recompensa, estoy ansioso por saber que es. La verdad es que estas semanas están siendo las mejores, Gin es genial, nunca había conocido a una chica así.
Y es por eso por lo que me vuelve loco.

Narrado por Gin.

Ahora me tengo que poner a pensar como va a ser el día de mañana y tengo que ponerme a su altura, me ha puesto el listón muy alto.
Dani puede ser un chulo, imbécil, cerdo, machista pero también tiene un lado bueno y romántico que me encanta.
Y la combinación de los dos es lo que hace que me guste cada día más.
No va a olvidar el día de mañana.

martes, 16 de julio de 2013

Capítulo 13.

Narrado por Dani.

La verdad es que todo lo que estoy haciendo por Gin, no lo había hecho por una chica. Menos mal que Julia y Ángela me ayudaron a preparar todo. Me dijeron que su bebida favorita de Starbucks era el caramel macchiato, que su número favorito era el catorce y bueno ellas se fueron de compras y le compraron lo que tiene en la taquilla.
La idea de hacer todo esto fue mía, pero sin ellas no habría podido hacer nada. Ahora espero que le guste lo demás que tengo preparado.

Narrado por Gin.

Abro la taquilla catorce y en ella hay un gel de ducha y champú, una toalla, también hay un peine y espuma para mi pelo rizado, un estuche con maquillaje y colonia.
Luego hay un vestido negro precioso muy ajustado, por la rodilla unas medias y una chaqueta y mis tacones negros. Cuando saco las cosas para llevármela a la ducha veo una nota.
"Esperamos que te guste lo que te hemos comprado, le hemos echado una ayuda a tu Romeo, pásatelo bien y disfruta. Te queremos, Julia y Ángela." 
Y al final de la carta veo un condón pegado y al lado pone "Por si lo necesitas, no queremos un mini Dani o una mini Gin."
Cuando leo esto me echo a reír, que tontas son pero las quiero un montón.
Me meto a ducharme, como siempre me quedo embobada debajo del chorro del agua caliente un rato, cuando salgo me seco, me peino me visto me maquillo y me arreglo como puedo mis rizos rebeldes.
Salgo a la puerta y veo que Dani ya esta allí, con un pantalón negro y una camisa muy guapo como siempre.
Cuando salgo se me queda mirando de arriba a abajo.
- Estas preciosa.
- Tu también estás muy guapo.- y le doy un beso.- Gracias por todo, en serio.
- No me des las gracias, ¿vamos a cenar?
- Claro, ¿a dónde vamos?
- Al mejor restaurante italiano de Londres.
- Genial, me encanta la comida italiana.
Llegamos al restaurante y Dani pide la mesa reservada, nos sentamos yo decido pedirme unos tallarines carbonara y Dani una lasaña.
- ¿Por qué haces todo esto?
- ¿El que?
- Esto este día, llevarme a tantos sitios y en fin todo.
- Para demostrarte que tu eres especial y que no te trato como a todas.
- No sí eso ya...
Llega la comida, cambiamos de tema, cuando terminamos de cenar Dani me dice que no pida postre que vamos a otro sitio pide la cuenta y nos vamos. Por supuesto no me deja pagar mi parte aunque yo quería. 
- Te debo una cena.
- No te la niego, si volvemos a salir juntos otra vez.
- ¿Y ahora a donde vamos?
- A tomar un buen helado italiano, de esos de crema.
- Que rico, pero no se sí me va a caber.
- Seguro que si, venga vamos.
Cuando llegamos hay un montón de helados, pero al final me decido por el de nube uno azul con pequeñas nubes por encima, esta buenísimo. Dani se toma uno de oreo.
Cuando terminamos nos vamos a la residencia, de la mano. Y cuando estamos entrando por la puerta veo un rostro familiar.
- Paula, ¿qué haces aquí?
Paula es mi hermana mayor, no nos parecemos en nada ella es alta y delgada, con el pelo liso y los ojos azules.
- Venía a decirte que me han dado la beca para estudiar aquí medicina, en un colegio de aquí al lado.
- ¿El colegio mayor que querías?
- Si ese.
- Enhorabuena Paula, te lo mereces.- digo dándole un abrazo.
- ¿Y este es tu novio?- me dice mirando a Dani.
- Que va es un amigo. 
- Bueno me voy ya, he llagado esta mañana pero no estabas así que decidí venir ahora, bueno hermanita nos vemos.- y me da dos besos.
- Hasta luego.
Y se va, la verdad es que me viene bien tener alguien más conocido aquí alguien como mi hermana con la que me llevaba muy bien.
- Joder que guapa es tu hermana.
- Y tu eres un imbécil.- y le doy un golpe en el brazo
- Que es broma.- dice riéndose y abrazándome.
- Déjame.
- No te enfades.- y me da un beso.
Me mira y ve que tengo una sonrisa en la cara.
- Te estás riendo, y si te ríes me perdonas.
- ¿Desde cuándo?
- Desde siempre.
- Ah claro, bueno te perdono pero porque eres tu.
- Bieeen.- dice haciendo el tonto
Llegamos a mi habitación.
- Bueno ¿entramos?- dice pícaro y se a lo que se refiere.
- Pues mira hoy tendrías posibilidades, pero ya esta Julia aquí.
- Pues la echamos.
- Si hombre.
- Jo.- y se pone a hacer como que llora.
- Que tonto eres, gracias por todo en serio.
- ¿Entonces eres mía?
- Eso ya se verá con el tiempo.- le doy un beso y me meto en mi habitación.

Narrado por Dani.

Es definitivo esta chica me vuelve completamente loco y después del día de hoy dice que todavía no sabe que va a hacer. Pero va a ser mía, la voy a conquistar.
Y no voy a parar hasta que no lo consiga.

lunes, 15 de julio de 2013

Capítulo 12.

Narrado por Gin.

Llegamos al Starbucks y Dani tenía encargados dos cafés, uno con mi nombre un caramel macchiato y el suyo un frapuccino y dos munffings. Cuando terminamos salimos a la puerta.
- Bueno ¿se puede saber ya a donde vamos?
- A jugar al paintball.
- ¿A eso que te tiras pintura?
- Sí, que pasa ¿tienes miedo?
- No, pero tu deberías tenerlo porque te recuerdo que me tengo que vengar de ti.
- Eso habrá que verlo.
Vamos andando hasta los campos para jugar, allí nos vestimos y nos ponen en equipos distintos. Nos enseñan a disparar y empezamos a jugar cada uno llevábamos un número así que yo me fije en el de Dani que era el 7 e iba todo el rato hacia él, él también me dio unas cuantas veces. Al final ganaron ellos y como no Dani me lo restregó todo el rato. Cuando salimos de los vestuarios uno de mis compañeros de equipo se nos acerca.
- Hola guapa, estabas en mi equipo, eres buena sabes.
- Gracias era la primera vez que jugaba.
- Toma mi número, por si quieres que vengamos a jugar alguna vez o a hacer otra cosa.- dice con una sonrisa.
- No creo que haga otra cosa contigo, soy su novio y esas cosas ya las hace conmigo, tenemos prisa hasta luego.- dice Dani enfadado.
- ¿Pero qué te pasa, por que le dices que eres mi novio? Tu ya tienes novia y yo puedo buscarme a alguien.  
- ¿No te acuerdas lo que te dije el otro día? Quiero que seas mía y de nadie más.
- Ya pero si tienes novia...
- Pero Belén y yo salimos solo porque ella es la capitana de las animadoras y yo del equipo de fútbol, pero ella se lía con otros. No nos gustamos mucho la verdad, supongo que cortáremos pronto.
- Pues hasta entonces yo puedo buscarme novio o algo, tengo derecho.
- El problema es...- cuando dice esto me coge de la cintura y me acerca a el.- Que yo no quiero compartirte.- y me besa.
- Pues no me compartas.- le susurro parando el beso.
- Tranquila no lo voy a hacer.- dice con una sonrisa y volviéndome a besar. - Bueno, es la una casi, ¿nos vamos a comer?.
- Claro, ¿a dónde vamos?
- Hay una bocatería por aquí cerca si quieres podemos ir ahí.
- Por mi vale.
La verdad es que la bocatería es bastante grande y tienen hasta 100 bocadillos distintos, yo me pido uno vegetal y Dani uno de pollo. Mientras comemos hablamos de todo un poco. 
- Que guapa estás ahora mismo.
- Sí, sobre todo porque estoy sudada y en chandal.
- Que sí, estas muy sexy.- dice con una de sus sonrisas.
- ¿Bueno y ahora que, nos vamos ya a la residencia?
- ¿Es que te quieres ir ahora que viene lo mejor?
- ¿Ah si, y que viene ahora?
- Ahora toca relajarse y descansar por el deporte que hemos hecho esta mañana. Vamos, que esta un poco lejos.
- Bueno, confío en ti.
- Haces bien.- dice riéndose.
De camino vemos un foto matón cuánto tiempo hacia que no me hacia fotos ahí, desde que me fui de España hacia tiempo que no los veía.
- ¿Y si nos hacemos unas fotos?- dice Dani.
- Venga vale.
Ponemos para que haga 6 fotos en la mayoría salimos haciendo el tonto pero en las dos ultimas decidimos en una ponernos bien y, en la otra darnos un beso. Sacamos dos copias, sin duda la última es la mejor de todas. Volvemos en marcha del sitio a donde me llevaba Dani.
Llegamos a un gimnasio, bastante grande, en el que nada más entrar saludan a Dani supongo que será donde venga a hacer deporte. En la recepción le dan a Dani dos cajas y nos vamos a los vestuarios y me da una de las cajas. La abro y dentro hay un bikini.
- ¿Por qué hay un bikini?
- Porque nos vamos a la piscina a bañarnos.
- ¿Con este frío?
- Es climatizada además el agua esta caliente.
- Bueno vale.
- Venga cámbiate ahora nos vemos.
Me meto vestuarios y me cambio, el bikini es azul que tapa lo justo y necesario, no es listo Dani ni nada, pero la verdad es que se lo esta currando mucho.
Salgo y voy a la piscina, donde se ya esta metido Dani. Estamos solos. Cuando llego Dani me recibe con un silbido y dice que me meta, me suelto la coleta y me tiro de cabeza. 
- Que bien te queda el bañador.
- Enseña un poco de más para mi gusto.
- Que va, es perfecto. Como tú.
- Anda no te pases, pelota.- y cuando digo esto le hago una ahogadilla.
- Con que esas tenemos.- dice cuando sale del agua, y me coge pero en vez de ahogarme me besa.
Nos tiramos toda la tarde así, nos salimos nos tumbamos en las hamacas, nos volvemos a bañar, ... Y nos liamos unas cuantas veces dentro y fuera del agua eso también hay que decirlo.
Llegan las ocho.
- Bueno, ¿quieres ir a cenar ya?
- ¿No es pronto? A parte no vamos a ir en chandal.
- Tu tranquila lo tengo todo controlado.
Nos vestimos cogemos las cosas y vamos a unas duchas, que están bastante bien y me da una llave.
- Tu taquilla es la catorce, tu número favorito ¿no? Ahí tendrás lo que necesites, nos vemos en la entrada del gimnasio en una hora. Nos vemos, preciosa, ponte muy guapa aunque siempre lo estás yo me pondré guapo por ti.- y cuando dice esto me da un beso y se va a las duchas de chicos.

No me puedo creer todo lo que esta haciendo por mí, a lo mejor tendría que darle una oportunidad. Eso sí, haber hecho todo esto tendrá su recompensa, pero de momento me voy a ver que me ha dejado Dani en la taquilla catorce, mi número favorito ¿cómo lo sabrá? Yo no se lo he dicho. 
Creo que me espera una noche de lo más especial.

sábado, 13 de julio de 2013

Capítulo 11.

Narrado por Gin.

Dani me estuvo dando el masaje en la espalda que no me vino nada mal la verdad, pero yo sabía que tenía truco.
- Te toca.
- ¿Cómo?
- Lo que oyes, venga sólo es un masaje.
Acepte a hacérselo para que se callara, le dije que se diera la vuelta y me subí encima de su culo.
- Me gusta esta postura.- dice riendo.
- Cállate si no quieres una contractura, que se hacerlas.
Después de estar un rato haciéndole masajes en la espalda, paro y me tumbo donde estaba.
- ¿Me toca a mi no?.- dice Dani.
- Si te hace ilusión.
- Ponte boca arriba.
- ¿Dónde me vas a dar el masaje, en las tetas?
- No estaría mal pero no.
Me pongo boca arriba y se sienta en mi ingle.
- A ver que haces.- le digo.
Empieza a darme varios besos en el cuello, subiendo hasta mi mejilla y volviendo a bajar, me quita la camiseta.
- Dani...
- Shh, déjate llevar Gin.- me susurra en el oído.
Y es lo que hago me quita la camiseta y me quedo en sujetador, me da un beso en la boca y va bajando, la barbilla, el cuello, el pecho y se para en la barriga antes de volver a la boca. Pero algo va mal, me levanto. ¿Qué estoy haciendo? Tiene novia. No puedo hacerlo.
- ¿Qué te pasa no te gusta?
- Si me gusta y ese es el problema, no quiero obsesionarme, además tienes novia y... - antes de que continúe me para.
- Gin, relájate es una noche, déjate llevar venga.- y diciendo esto vuelve a besarme por todo el cuerpo literalmente.
Y yo como me dice Dani me dejo llevar, doy un pequeño salto y enrollo mis piernas en su cintura, Dani me apoya contra la pared y mientras me besa me hace masajes en el culo que hacen que de vez en cuando se me escape un pequeño gemido. Yo le acaricio la espalda y el pecho deprisa.
Me lleva hasta la cama y nos tiramos allí el encima de mi.
- Gin...
- Cállate.- digo acariciando su entrepierna y el sube desde mi barriga hasta mi oído besándome el cuerpo y cuando por fin llega a mi oído.
- Te veo mañana preciosa.- susurra en mi oído con una sonrisa y cuando dice esto se levanta de la cama y se viste.
- ¿Cómo?- digo yo muy sorprendida.
- Te estoy dando de tu propia medicina.
- Muy mal Dani muy mal, te arrepentirás, porque me tengo que volver a vengar de ti. Con el calentón quedamos en paz, ahora lo has vuelto a estropear.
- Creo que estropear no es la palabra exacta, estoy deseando volver a jugar contigo.
- Te vas a arrepentir, te lo he dicho...
- Duerme bien.- se despide de mi con un cariñoso beso en los labios y se va.
Este chico es de lo que no hay, se ha vengado de mi pero me volveré a vengar de él, eso sin duda alguna.

Narrado por Dani.

Que cara se le ha quedado cuando le he dicho que me iba, pero la verdad es que yo era el primero que quería seguir con aquello.
Mañana pasaré el día con ella, para demostrarle que no la trato como a todas. Belén me está empezando a dar igual porque ella se lía con más chicos lo se perfectamente. Además no tiene por que enterarse de nada.

Narrado por Gin. 

Nada más levantarme veo una nota en el suelo de mi cuarto.
"Buenos días, ¿te tuviste que echar agua fría anoche para bajar el calentón? Seguro que si, te espero en el hall a las 12 vamos a dar una vuelta por el centro, te enseñare una cuantas cosas. No acepto un no por respuesta, y ponte chandal."
¿Me esta pidiendo una cita? Eso parece a ver con que me sorprende el guapearas este.
Me pongo unas mallas negras ajustadas una camiseta negra de manga corta una sudadera rosa fucsia de Adidas y un abrigo encima porque en Londres hace mucho frío. Me miro mil veces al espejo y creo que lo mejor es hacerme una coleta.
Me bajo al hall y allí esta el moreno en chandal como yo tan guapo como siempre. Me recibe con una de esas sonrisas que tanto me gustan.
- Buenos días.- me da un beso corto en los labios, sin que nos vea nadie.
- No tan buenos.
- Se que no he dormido contigo pero no serán tan malos ¿no?
- Que imbécil.
- Ya estabas tardando en decírmelo.
- Bueno y ¿a dónde me llevas?
- Lo primero de todo es coger fuerzas, y comer algo, a tu cafetería favorita.
- ¿A Starbucks? 
- Claro, es esa ¿no? Espero no haberme equivocado ya que todo esta preparado.
- ¿Preparado? 
- Claro, venga que se nos hace tarde. No sabes el día que nos espera, preciosa.
- Miedo me das.- y cuando digo esto se echa a reír.

La verdad es que estoy impaciente y nerviosa ¿que habrá preparado? Este chico es un misterio y la verdad es que se lo esta currando. A lo mejor le doy una oportunidad y todo.
Y es que el día sólo acababa de empezar.

Capítulo 10.

Narrado por Gin.

No me podía creer lo que estaba haciendo Dani. ¿Por qué había venido? ¿Qué quería? Lo tenía claro lo iba a matar.
- Hola, pero que casualidad que nos hayamos encontrado.
- Demasiada diría yo.-  le dije mirándole muy enfadada.
Se sentaron con nosotros y Dani se sentó en frente de mí, estuvo toda la noche sonriente y hablador al contrario que los demás que estuvimos incómodos y muy callados.
Cuando terminamos de cenar me levanté.
- Voy un momento al servicio.-  Y le hice un gesto a Dani con la cabeza para que viniera.
- Si yo también voy a ir.
Cuando llegamos al baño me contuve para no matar allí a Dani.
- ¿Qué estas haciendo?
- Venir a cenar igual que tu.
- Lo has hecho a posta, tu y yo no somos nada, déjame en paz.
- Y lo de la otra noche, ¿no fue nada tampoco? Gin se que te gusto.
- No, no me gustas nada.
- Mientes muy mal Gin.
- Mira déjalo, ya hablaremos esto luego, nos están esperando.
- Mejor, más tiempo para estar contigo a solas.
- Que imbécil eres.
- Pero te encanto.- dice sonriendo.
Cuando llegamos a la mesa pagamos la cuenta, y ahora si cada uno se va por su parte. 
- Pasadlo bien chicos.- dice Dani. 
- Lo mismo digo.- digo sonriéndole.
Marco y yo decidimos irnos a por un helado.
- Lo siento mucho Marco, no sabía que el imbécil ese iba a venir.
- Tranquila, centrémonos en ahora.- dice con una sonrisa.- ¿De qué quieres el helado?
- De chocolate por favor.
- Vale, voy a pedirlos.
Marco es un cielo, hablamos toda la noche y reímos, cuando llegamos a la residencia nos despedimos con dos besos y nos damos nuestro número de teléfono.
Cuando estoy llegando a mi habitación me acuerdo que este fin de semana estoy sola porque Julia se ha ido con sus padres.
Justo cuando voy a cerrar Dani se cuela en mi habitación.
- Deja de colarte en mi habitación pesado, fuera.
- ¿Qué tal con Marco?
- Genial, me gusta mucho.
- Mentira.
- A ver Dani, acéptalo no me gustas, lo de la otra noche fue un calentón y ya está, admite que por una vez en tu vida a una chica no le gustas.
- No puedo, y por eso voy a conseguirte, sólo quiero que seas mía y de nadie más.
Y cuando dice esto pone las manos en mi cintura y empieza a besarme el cuello, yo no se lo impido, cierro los ojos y pienso en lo que me ha dicho que sólo quiero que sea suya. No lo soportaré pero me encanta.
- Sabia que te gustaba.- en cuanto dice esto abro los ojos.
- No me gustas.
- ¿Y por que no me paras?
- Yo...
- Tu...
- Tienes novia.
- Déjate llevar Gin.
Y en cuanto dice esto empieza a besarme en la boca. Lo paro.
- No, no quiero ser otra chica de usar y tirar.
- No vas a ser así.
- Venga Dani a ¿cuantas le has dicho eso?
- A las mismas que me han dejado con un calentón o a las que he ido a su cita por miedo a que no fueran mías, o sea a ninguna.
- No te creo.
- Estoy siendo sincero, pero no me creas allá tu, por cierto ¿esta noche estas sola no?
- Si, pero no te vas a quedar aquí ni de coña.
- Pues entonces tendré que decirle a Marco lo que hicimos la otra noche.
- No te creerá.
- Bueno teniendo en cuenta lo que ha pasado hoy, yo creo que por lo menos sospechará y que lastima con lo bonita pareja que hacíais.
- Eres un asqueroso, imbécil, insoportable.
- Si, pero este asqueroso, imbécil e insoportable va a dormir contigo hoy.
- Como se te ocurra hacerme algo te parto la cara.
- Tranquila no pasará nada, o quizás si quien sabe.- dice metiéndose en la cama.
Me voy a ponerme el pijama y cuando salgo veo a Dani en mi cama mirándome de arriba a abajo
- Vaya que guapa estás.
Me meto en la cama y apago la luz.
- Buenas noches y a dormir.
- Buenas noches, no lo tengo tan claro eso de dormir.- y cuando dice esto le doy una patada.
Tengo al lado a Dani medio desnudo en mi cama, con las hormonas revolucionadas, y yo que no se si voy a poder resistir a lo que me haga Dani, porque algo va a hacer.
Noto sus manos en mi espalda.
- Dani para.
- Tranquila solo es un masaje lo prometo.

Pero lo que comenzó como un masaje iría yendo a más y más y más.

 

viernes, 12 de julio de 2013

Capítulo 9.

Narrado por Gin.

¿Acabo de hacer lo he acabo de hacer?¿He dejado con un calentón impresionante al tío más bueno del internado? Pues sí, lo he hecho no se cómo le habrá sentado pero así se dará cuenta de que no soy una de esas chicas sin cerebro con las que se acuesta.
De todas formas, había dicho que me iba a olvidar de él. Yo lo intento pero si él se porta así es imposible. Decido irme a dormir, es bastante tarde y mañana hay clase, pero hasta en mi último pensamiento antes de dormirme esta el chico moreno. Sin duda no va a ser nada fácil quitármelo de la cabeza.

Narrado por Dani.

Sin duda Gin es de lo que no hay, ninguna chica me había hecho eso antes. Siempre he tenido a la chica que he querido, ha sido siempre muy fácil. Pero ella no es así.
Y creo que es eso lo que no me deja parar de hacerla de rabiar, e intentar conquistarla, es distinta.
Y eso me encanta, y lo tengo claro Gin se va a enamorar de mí, no se cómo, pero lo conseguiré.
Y siempre consigo lo que quiero.

Narrado por Gin.

Empiezan las clases, a primera hora me toca física y química. Dani se sienta a mi lado, con la atenta mirada de su novia, y me dice en voz baja.
- ¿Y si terminamos lo de ayer?
- Lo siento, si me lío con un tío no repito. Además lo de ayer solo fue para dejarte con el calentón.
- Venga Gin, se que te gusto.
- Claro.- digo en tono irónico.
Noto su mano subiendo por encima de las medias de mi uniforme, llegando a mi muslo, dando pequeños masajes. Contrólate Gin contrólate.
- ¿Y esto tampoco te gusta?
- No, no me gusta nada que venga de ti.
- Si vamos al baño seguro que hago algo que te gusta.
- Que cerdo eres.
- Pero estás loca por mi.
- Sigue soñando.
- Ya hago, contigo todas las noches, juntos en mi cama.
Y cuando dice esto sube del muslo a la ingle y le doy un puñetazo en el brazo para que pare, y se empieza a reír. No tiene remedio. Pasamos toda la clase así y no puedo negar que me lo pasara mal.
Cuando la clase termina Ángela se acerca a nosotros.
- Hola Dani, hola Gin te tengo que contar una cosa.
- Cuéntame.
- Es Marco, un jugador del equipo de fútbol, me ha dicho que eres muy guapa y creo que esta tarde te va a pedir ir a dar una vuelta.
Marco era un chico bastante guapo, no estaba nada mal, era de pelo castaño con ojos verdes pero no superaba a Dani.
- Ah bueno, pues nada muy bien.
- ¿Le vas a decir que sí?- dice Dani un poco molesto.
- No sé, además eso es asunto mío.
- Yo soy mil veces más guapo que Marco.
- Depende de para quien, bueno voy a ir a hablar con él ¿sabes dónde está, Ángela?
- Creo que en la biblioteca.
- Vale, luego te cuento.
- Y a mi.- dice Dani sonriendo y guiñandome un ojo.
- A ti ni agua.- digo en dirección a la biblioteca.
Marco resulta ser muy majo, quedamos para ir a tomar una pizza a las 6, quien sabe a lo mejor si quedo con el consigo olvidarme de Dani, cuando termino de hablar con el le mando un whatsapp a Ángela para contárselo y me voy a la siguiente clase.

Narrado por Dani.

Cuando veo que Gin se ha ido no puedo evitar preguntarle a Ángela por Marco.
- Ángela ¿tu crees que van a salir juntos?
- No se, supongo Marco es muy simpático y no creo que Gin no salga con el ¿por qué te preocupa tanto?
- No se, curiosidad supongo.
- Pues te confirmo que van a salir, Gin me acaba de mandar un whatsapp, han quedado a las seis en el hall para ir a tomar una pizza.
- ¿A las 6 no?
- Si, y no hagas ninguna de las tuyas. Tienes novia.
- Por supuesto.- digo riéndome.

Narrado por Gin.

Llegan las seis, y Marco esta en el hall esperándome cogemos un autobús y nos vamos al centro de Londres, hablamos de nosotros, del internado, ...
- ¿Y qué lío te traes con Dani?
- ¿Cómo?
- Sí, que si estáis juntos o algo de eso se os ve muy unidos.
- Que va, Dani tiene novia, pero sólo somos amigos.- esto lo digo sin mucha convicción.
- Me alegro, por cierto estas muy guapa.
- Tu también.- digo con una sonrisa.
La verdad es que es muy majo y aparte muy guapo, podría llegar a olvidarme de Dani. Llegamos a la pizzería y pedimos una familiar de bacon para los dos. Hablamos tranquilamente y riendo.

Pero de repente veo pasar por la puerta a una chica rubia y a un chico moreno, que me saluda con la mano. No puede estar pasando. Se acercan a la mesa.
- Hola chicos, pero que casualidad que nos hayamos encontrado.- dice Dani con una sonrisa de oreja a oreja.

jueves, 11 de julio de 2013

Capitulo 8.

 Narrado por Gin.

- Julia ¿vas a bajar a cenar?
- Claro.
- ¿Me puedes traer un sándwich cuando vuelvas por favor? No me apetece encontrarme con Dani.
- Claro te lo traeré, pero Gin lo vas a tener que ver tarde o temprano.
- Pero prefiero que sea tarde.
- Bueno como quieras, yo me bajo ya, te traeré el sándwich.
- Vale gracias.- y diciendo esto me meto debajo de las sábanas con la música de mi iPod sonando a todo volumen.
Mientras la música de Glee suena en mis oídos, yo no le presto atención, sigo pensando en el chico moreno de ojos oscuros.
¿Le gustaré? Digo yo que algo le tengo que gustar si no no vendría detrás de mi todo el rato, haciéndome bromas y ese tipo de cosas ¿no? Pero la verdad es que yo no entiendo muy bien la mecánica de los chicos.
Tengo que olvidarme de él, no me conviene. Es el típico chico que se lía con todas pero no le gusta a ninguna y que deja a todas enamoradas.
Si, ya esta seremos amigos. Sólo amigos.
Y sigo escuchando música intentando quitarme a Dani de la cabeza.

Narrado por Dani.

Que gilipollas fui al hacerle eso a Gin, pero si me llegan a pillar otra vez, si que me expulsan y para siempre.
Pero aún así eso no es excusa para dejarla sola, comiéndose todo el marrón. Lo mejor es que no se cómo disculparme, Gin es una chica que tiene mucho carácter y mucho orgullo no será fácil pero lo conseguiré. 
Bajo al comedor a ver si la veo por allí e intento que me perdone.
- Hola Julia, ¿no ha bajado Gin a cenar?
- No, se ha quedado arriba ahora le subiré un sándwich.
- Ah... Se lo subo yo ¿vale?
- Bueno, no creo que te abra la puerta esta muy enfadada.
- Ya lo se, pero por intentarlo.
- Que tengas suerte.
- Gracias.
Cojo un sándwich y me voy a la habitación de Gin, con la esperanza de arreglar algo.

Narrado por Gin.

Me pongo el pijama, me hago un moño y me pongo a ver Glee en el portátil, es lo único que me consuela ahora. Oigo que tocan a la puerta, que raro Julia siempre se lleva la llave.
Mi gran error fue no preguntar antes de abrir y aunque sólo abrí un poco, Dani hizo fuerza y entro en mi habitación.
- Fuera.
- Tengo tu sándwich.- dice riendo con cara de seductor.
- Fuera.
- No me iré hasta que no me perdones.
En esos momentos lo más normal en mi es que hubiera empezado a chillar diciendo que se fuera y ese tipo de cosas pero por el contrario me tumbe en la cama apague el portátil me arrope y me intente  dormir.
- ¿Que haces?
- Has dicho que no te vas a ir, pues como no te voy a perdonar me voy a dormir, me da absolutamente igual lo que hagas, no pienso hacerte ni caso.- y me tumbo boca abajo y cierro los ojos.
De repente noto un cuerpo acostándose a mi lado, y es que Dani no se da por vencido.
- ¿Pero qué haces?
- Te he dicho que no me voy a ir hasta que me perdones, y estoy cansado.
- Fuera de mi cama.
- Ni de coña, además has dicho que me ibas a ignorar.- dice con una sonrisa de oreja a oreja.
- Es verdad, buenas noches.
- Buenas noches.
- Una cosa, si te perdono me dejarías en paz y te irías al instante.
- En cuanto me lo dijeras saldría por la puerta sin quejarme.
- ¿Lo prometes?
- Lo prometo.
Noto su aliento caliente en mi cuello y entiendo lo mucho que me gusta, una mano caliente sube por la piel desnuda de mi espalda acariciandola suavemente y va bajando hasta mi muslo pasando por mi ingle. Pero en vez de pegarle la hostia del siglo, se me ocurre otra idea mejor.
Apago la luz para que no se vea nada y me doy la vuelta mirándole a él, y empiezo a acariciarle el pecho despacio y a darle pequeños besos en el cuello. Él sorprendido hace lo mismo, tocando mi espalda y mis muslos pasando por mi culo varias veces.
Me pongo encima de el le quito la camiseta y le doy besos en el pecho, noto como le gusta y su respiración es más entrecortada, me quita la camiseta y antes de que pueda tocar nada de mi delantera me agacho le empiezo a besar los labios y bajo mi mano hasta su entrepierna que acaricio con el pantalón, por supuesto y noto como el bulto de su pantalón sube, se me escapa una risa. Sigo besándole el cuello hasta subir a su oído donde le susurro.
- Te perdono, puedes irte.
Me quito de encima de él, me siento en la cama y me pongo la camiseta, creo que soy la primera que lo deja con el calentón.
- Esto no va a quedar así, lo terminaremos algún día.-dice sonriendo.
- Sería divertido volverte a hacer lo mismo.- digo yo.
- No te dejaría escapar, nunca.
Y después de decir esto se acerca a mi y me da un beso, un beso largo. Que sería el primero de muchos besos así.

martes, 9 de julio de 2013

Capítulo 7.

Narrado por Gin.

Dani y yo nos levantamos a las 6, es sábado y no creemos que haya mucha gente por el internado. Llegamos al internado a las seis y cuarto y conseguimos meternos sin que la conserje que hay en la puerta nos vea, esta demasiado entretenida con un sudoku. Nos quedamos en un pasillo.
- Uf, ha faltado poco.- digo yo descansando sobre la pared.
- Ha estado bien tenemos que repetir.
- Si, pero la próxima vez lo repites con tu novia.- Cuando digo esto intento irme pero Dani me coge del  brazo y me lleva hacia él.
- ¿No me das un beso de despedida?
Y justo cuando termina de decir eso, veo a la conserje que viene a lo lejos.
- Mierda la conserje.- digo. Nos va a pillar con la ropa de ayer y nos llevará al director.
- Es cierto, adiós.- dice Dani y sale corriendo.
Me quedo sin palabras cuando se va, no me puedo creer lo que ha hecho. Lo mejor de todo es que la conserje me ha visto. Y me llama. Me entra el pánico no se que hacer, nada más que quedarme donde estoy paralizada, pensando en la bronca que me llevare cuando me expulsen. La conserje cada vez esta más cerca.
De repente mi salvación, una chica morena de pelo rizado y ojos verdes pasa por allí no puedo dejar pasar la oportunidad.
- Oye chica.
- ¿Qué?
- Necesito que me ayudes, se que no me conoces y que te daré igual pero tienes que ayudarme te daré lo que quieras después a ver esa conserje va a venir y me preguntara que de donde vengo etcétera tienes que inventarte una excusa o algo sígueme el rollo lo que sea para que no me pille, dime  que lo harás.
- Si, te ayudare tranquila.
- Muchísimas gracias, mi nombre es Gin por si acaso y tu eres...
- Cris.
- Cris, vale perfecto.
Nos dijimos todo justo a tiempo.
- ¿Eh tu de donde vienes así?
Me quedo sin palabras
- De mi habitación, ha dormido allí, ayer después de la fiesta se vino conmigo porque se olvidó la llave, y no encontraba a su compañera.
- Eso.
Esta chica vale para la improvisación.
- ¿Y tu sin conocerla la has dejado dormir en tu habitación, además donde ha dormido si estaba u compañera?
- Si la conozco, se llama Gin nos hicimos ayer amigas en la fiesta, yo es que cojo confianza enseguida en las personas, no se sí será un defecto. Mi compañera da la casualidad que este fin de semana se ha ido con sus padres, tenía permiso.
- Eso.- es la única palabra que me sale a mi en ese momento.
- Esta bien por esta vez lo dejare pasar, pero no te quito el ojo de encima Ginebra, porque de ahí viene  Gin ¿no?
- Descuide señora, no notara que estoy aquí y sí, me llamo Ginebra.
Y después de que se vaya me siento en el suelo, de la que me he librado y todo gracias a Cris.
- Muchísimas gracias Cris ¿que quieres a cambio?
- Nada, en serio ha sido un favor.
- Te invito a un café en Starbucks.
- Bueno si insistes, ¿esta tarde a las 5 y media en el hall?
- Perfecto.
- Allí nos vemos.
- Hasta esta tarde.

Llego a mi habitación y le cuento todo a Julia, necesitaba desahogarme, ella me comprende y comprende también lo gilipollas que ha sido Dani, que no piense que le voy a volver a hablar.
No bajo al comedor a comer, no tengo hambre además tampoco quiero encontrarme con Dani la verdad. Duermo hasta que llega la hora de irme con Cris al Starbucks. Me pongo una sudadera, vaqueros y converse lo más cómodo que tengo me arreglo un poco el pelo con las manos que todavía sigue liso y me bajo al hall a esperar a Cris. Cuando llega nos vamos al centro donde se encuentra el Starbucks.
De camino nos vamos conociendo, Cris es una chica muy maja y muy guapa, a parte es muy deportista y me dice que le gustan todos los deportes pero el que más el baloncesto y que jugaba en un equipo hasta que se vino a Londres.
Llegamos por fin a Starbucks, llego a la mesa en la que se ha sentado Cris con dos vasos con nuestro nombre, el mío es un Frapuccino, ella en cambio se ha pedido un batido de chocolate. También he comprado dos munffings que están buenísimos.
- Bueno y tu y Dani que ¿sois amantes o algo parecido? Porque el sale con Belén.
- Que va lo de anoche fue un malentendido no va a pasar nada.
- Que pena hacéis buena pareja.- dice dando un sorbo al batido.
- Que va, el y yo somos totalmente distintos no pegamos ni con cola.
- ¿No has oído nunca lo de que los opuestos se atraen?
- Si, pero creo que no es válido en este caso.
- A mi me parece que sí, pero bueno, ¿nos vamos? Ya está anocheciendo.
- Claro.
Llegamos a la residencia y me despido de Cris con dos besos diciendo que teníamos que repetir, y cuando estoy abriendo la puerta de mi habitación huelo a alguien detrás de mi que lleva "one million".
- Hola Gin, sobre lo de esta mañana...
- Piérdete Dani.
Y le cierro la puerta en las narices. Me tumbo encima de la cama y pongo la música de iPod a tope para no escuchar a Dani llamando a la puerta y gritando mi nombre diciendo que por favor le abriera que teníamos que hablar.
No le iba a perdonar. O eso creía.

lunes, 8 de julio de 2013

Capítulo 6.

Narrado por Gin.

- Dani, no voy a hacer nada contigo que lo sepas.
- Aha.- Dice empezandome a besar el cuello yo cierro los ojos para intentar contenerme.
- Para ya en serio.
- Enseguida.- dice cuando noto el calor de sus manos por mi espalda, y justo cuando nuestras bocas están a punto de rozarse...
- ¡Eh vosotros, que hacéis aquí, a la residencia!- dice un conserje.
- Mierda, corre.
Dani me coge de la mano y echamos a correr, el conserje corre detrás de nosotros y en medio de la nada veo una caseta de madera en la que nos metemos para que no os encuentren. Dani fuerza la puerta para que no puedan pasar.
- No la fuerces tenemos que irnos.
- Sal tu a ver que te dice el conserje.
- ¿No crees que notarán que no estamos?
- ¿Llevas el móvil?
- Claro.
- Llama a Ángela y dile que nos cubra, que vas a pasar la mejor noche de tu vida conmigo.
- Dani, tenemos que irnos.
- Gin, no nos van a encontrar, si salimos de aquí nos pillarán, confía en mi no va a pasar nada si nos quedamos aquí.
- ¿Seguro? 
- Siiiiiii.
No me gusta la idea de Dani, pero tiene razón si salimos nos encontrarán, y nos expulsarán no puedo permitir eso. Llamé a Ángela y le conté lo que nos paso me dijo que no me preocupara y que aprovechara mi oportunidad y después de unos cuantos insultos cariñosos y unas risas nos despedimos. Me encuentro a Dani haciendo una cama con unas mantas y unos cojines viejos.
- ¿Vamos a dormir ahí? 
- Lo siento su majestad es lo que hay.
Y después de decir esto, se empieza a quitar el polo, menudo cuerpo, no esta muy fuerte pero tampoco flojo de más. Está perfecto.
- ¿Qué haces?
- No quiero que se me arrugue la ropa a parte aquí hace un calor tremendo. Tu deberías hacer lo mismo si no quieres que se te arrugue tu bonita camisa.
La verdad es que fuera hacia frío pero en esa caseta hacia un calor horrible, pero desnudarme sería una tentación más, así que me quito la chaqueta y me hago una coleta alta.
- ¿No te vas a quitar la ropa?
- No te voy a dar ese placer.
- Mierda.
 Me tumbo en las mantas estoy muerta, son las 2 de la mañana y tenemos que madrugar para que no se enteren que faltamos. Dani se tumba a mi lado. 
- Gin.
- Que.
- Lo de antes, ¿te ha gustado no?
- Me ha encantado.- digo en tono irónico.
- Se que te gusto, si no hubiera venido el conserje lo habríamos hecho allí en medio del jardín.
- Claro Dani claro, venga a dormir.
- ¿Y ahora no te apetece? 
- Si te acercas a mi, duermes fuera.
- Vale, buenas noches.
- Buenas noches.
Me pongo de lado dándole la espalda, y noto como su brazo me rodea la cintura y me acerca a el, pero no hace nada más.
Le dejo que siga así porque me gusta y me hace sentir más segura. La verdad es que Dani me gusta mucho pero no quiero nada con el, se lo que el quiere conmigo y yo no soy una chica fácil y menos de usar y tirar.
Ahora lo que de verdad me preocupaba era como íbamos a pasar mañana a la residencia sin que nos pillarán eso si que no iba a ser fácil.

sábado, 6 de julio de 2013

Capítulo 5.

Narrado por Gin.

Lo que menos necesitaba yo en ese momento era que viniera Dani, a enamorarme más de lo que lo estaba haciendo ya.
- Hola Gin, estás muy guapa.
- Hola, tu también.
- ¿Qué haces aquí tan sola?
- Ángela ha ido a por la bebida.- Y en cuanto termino de decir la frase busco a Ángela con la mirada, y me la encuentro entreteniendo a Belén, se me queda mirando y me guiña un ojo. 
- ¿Quieres que vayamos a dar un paseo? 
- Eh, echa el freno se lo que significa eso y, tienes novia no voy a hacer nada contigo.
- Tranquila sólo es a dar un paseo, lo prometo.
- Bueno vale.
Sabía que lo que estaba haciendo era un error, pero no pude contenerme a irme con el chico más guapo del internado a dar un paseo a solas.

Vamos a los jardines centrales del internado, aquello era enorme hablamos un poco de todo, de nuestra familia, nuestra ciudad... Así me entero de que Dani vive en Madrid como yo, y que sus padres lo mandaron allí para perderle de vista, por lo visto el y sus padres no se llevan muy bien tampoco le he querido preguntar. 
- Bueno ya hemos hablado suficiente de mi te toca.
- La verdad es que no hay mucho que contar, vivo en Madrid como tu y mis padres me mandaron aquí para que aprendiera inglés, o por lo menos es lo que ellos dicen.
- Y ¿tienes novio? 
- No, prefiero estar sola.
- Seguro que te gusta alguien. 
- No estés tan seguro.
- Bueno y cuanto me pondrías de puntuación a mi.
- A ti un menos uno.
- Va, en serio.
- No se, según con quien te compares.
- Con los de clase.
- A ver Dani, si yo se lo que quieres, quieres que te diga que eres muy guapo y ponerte puntuación muy alta.
- Básicamente si.
- Lo sabía.

Y en ese momento me doy cuenta que de tanto paseo, no tengo ni idea de donde estamos, se que hemos pasado las pistas de deporte, la cafetería, rodeado el internado pero por allí no veo en ningún sitio la residencia, sólo se ve campo y más campo.

- Bueno yo me voy a ir ya, se ha hecho tarde, pero una cosa donde estamos no tengo ni idea, dime donde esta la residencia.
Si me hubiera callado nada de lo que vino a continuación habría pasado.
- ¿Y yo que gano?
- ¿Cómo?
- Si que que gano, si te llevo a la residencia me darás algo a cambio.
- No te mataré.
- Bueno si me matas, no sabrás donde está.
- Estabas muy bien antes, no se por que tienes que cambiar a la faceta de chulo asqueroso.
- Hablemos de ahora, ¿qué me vas a dar a cambio?
- Dani en serio estoy muy cansada llévame a la residencia, no tengo ganas de tonterías.
- Aha.- dice asintiéndome como a los tontos, y a la vez apartándome el pelo de la cara para tener mejor vista de mi escote.
- Dani, va, en serio.
- Ya te he dicho que quiero algo a cambio. 
- ¿Cómo que?
Cuando termino de decir esto me coge de la cintura acercándome a él. A saber lo que va a decir a continuación.
A saber.

viernes, 5 de julio de 2013

Capítulo 4.

Narrado por Gin.

Ángela casi se desmaya al saber que no tengo ni una falda, bien vestido para ponerme para la fiesta así que sin falta, la tarde antes de la fiesta decide irse conmigo de compras por el centro de Londres.
La verdad es, que me apetecía bajar al centro a comprar aunque el tiempo como siempre no acompañara mucho.
Primero fuimos a unas tiendas bastante caras de las que no me podía permitir ni siquiera un bolso, así que a regañadientes convencí a Ángela a que me llevara a tiendas más baratas o de segunda mano, la segunda opción la descarto en un momento.
Tras probarme varios vestidos decidimos que me compraría unos pantalones y una camisa arreglada porque todos los vestidos que me probaba eran demasiado arreglados. Después de mil modelitos elegidos por Ángela encontramos el perfecto, unos pantalones negros pitillo, con una camisa rosa salmón sin mangas y una americana negra, y unos tacones negros con sus complementos. La verdad tenía que admitir que Ángela tenía muy buen gusto.
Nos fuimos corriendo a la residencia, porque llevábamos el tiempo justo. Me alise el pelo, lo suelo hacer siempre para las ocasiones especiales ya que mis rizos no suelen estar muy presentables a veces, me maquille un poco para quitar los granos, un poco de colorete, raya en el ojo y lista.

La fiesta era en unos de los salones de la residencia, bastante bonito. Me quede con Julia y Coral, porque como suponía Ángela se iría con Sam y los demás jugadores y animadoras, pasamos un buen rato hablando de nuestras vidas, aunque de la mía no hubiera mucho que contar. Se nos acercaron algunos chicos ofreciéndonos, como no, ir al baño con alguno de ellos, o simplemente ir a dar un paseo pero las tres sabíamos perfectamente a que se refería "el paseo".

Julia y Coral se fueron bastante pronto, así que Ángela se vino conmigo y me presentó a una chica que se llamaba Helena, era morena en color de piel y pelo,con grandes ojos marrones y bajita. Esa noche llevaba un vestido de marinerita que no se por que me hizo gracia. Era un chica abierta y muy extrovertida que cogía confianzas enseguida pero me caía bien. Ella también se fue y nos dejó a mi y a Ángela solas. 
Pero la verdad es que no podía negar que había estado toda la noche mirando a Dani, estaba realmente guapo con el polo rojo y las bermudas azules. 
- ¿Quieres algo de beber?.- dijo Ángela. -Gin hola estoy aquí.
- Eh, si si una coca cola por favor.
- Vale, pero no mires tanto a Dani que se te van a salir los ojos.- dice riéndose y se va a por la bebida.
¿Tanto se me notará? Tengo que controlarme y olvidarme de el. No va a pasar nada entre nosotros dos, ¿o quizás si? No, no va a pasar nada, el esta con la mosquita muerta y yo sola, y así es como mejor se esta. Exacto. Sola. Nunca he tenido novio bueno si no contamos parvulititos claro. Mi madre me contó que en esa etapa de mi vida era un poco fulana, me gustaba un chico pero cada día me iba con uno porque me aburría estando con uno sólo.
Bueno el caso es que tengo que olvidarme de el como sea, es el típico chico que se lía con todas, y no me apetece sufrir por alguien así. Decido. No pienso enamorarme, tengo 17 años, estoy en la flor de la vida.

Pero pensando esto detrás de mi huelo un aroma un tanto peculiar, "one million", no puede ser.

- Hola Gin, estás muy guapa.


jueves, 4 de julio de 2013

Capítulo 3.

Narrado por Gin.

No puedo evitar decir que estoy empezando a sentir algo por el imbécil de Dani. Es un completo incordio, es un cerdo, un asqueroso, un machista pero hay que decir que sabe como conquistar a una chica.
Cuando se te acerca por detras, en las taquilla y te susurra al oído "te mueres por mí y lo sé" en ese momento me dan ganas de matarlo por creido, pero no puedo evitar que en ese momento me salga una sonrisa de oreja a oreja, y que me muerda el labio justo antes de girarme y decirle estupido o algo por el estilo con mi lado mas borde y asqueroso pero esque eso se que me funciona y se que le encanta.

Dejando al lado un poco el tema de Dani, en el que no tardaré en volver a hablar... Esta semana Julia me ha presentado a una chica se llama Coral otra novata como yo, extraño el nombre yo creo que sus padres son medio hippies o algo de eso, es una chica muy mona tiene el pelo largo y rubio, ojos verdes oscuros, unas gafas ray-ban de esas modernas y su vestimente es entre hipster y hippie. Que decir de su caracter es una chica muy maja, me cae bien, pero la verdad es mejor no enfadarse con ella ¡menudo caracter tiene! A veces es un poco mandona, pero es una chica muy sensata a parte de lista.

Este fin de semana me he enterado de que hay una fiesta de inicio de curso, nos han invitado claramente por ser amigas de Angela una animadora. Nosotras Julia, Coral y yo seguimos en el grupo de "los normales" pero prefiero que todo siga así.

- La fiesta es a las 22.00 procurad ir arregladas pero informales.- dijo Angela
- Vamos que con una falda y una camiseta voy que chuto ¿no?-. dije yo que en temas de moda no estoy muy puesta.
- Si, con eso vas perfecta.
- Pero no te pongas de reina de los bailes Angela que te conocemos.que tu eres capaz de aparecer allí con un vestido de gala-. replicó Julia
- Tranquila Julia iré informal pero formal.- dijo Angela a la que no le sentó bien este ultimo comentario
- Eso espero-. dijo Julia no muy convencida.

La verdad es que las chicas están haciendo la estancia aquí mucho mas agradable, no me imaginaria como sería esto si estuviera sola. Julia y yo nos hemos hecho muy amigas, nos hemos dado cuenta que compartimos bastantes gustos musicales, televisivos, sobre la moda... Es una gran amiga.

Hablando de amigas todo el mundo tiene que tener enemigas ¿no? bueno pues parece que yo aquí ya estoy encontrando las mías.El otro día Belén la novia de Dani me vió hablando más de lo normal con el, cuando estabamos en el baño sus clones pijos me cerraron la puerta.
- A ver tu GinTonic ¿quien te crees que eres para ir tonteando con mi novio?
- Yo no tonteo con tu novio Barbie, en todo caso el se acerca a mi.
- Si seguro, la proxima vez que te acerques a el te cortare mechon a mechon ese pelo rizado tan bonito que tienes ¿entendido?
- Mira Barbie no me das miedo, pero una cosa ¿me ves más guapa que tú?
- Por supuesto que no, vas a comparar.
- Pues entonces no se de que te preocupas tanto, si tan guapa te crees no deberías preocuparte de que nadie te quitara a Dani.
- Yo...
- Tu tu tu si, piensa lo que te he dicho y me voy que llego tarde a clase de mates, chaito.- termino diciendo con voz repelente como suelen hacer ellas cuando se despiden.

La verdad es que me gusta dejar en su sitio a las pijas estas, pero no creo que sea muy bueno para mi reputación, no me importa mucho lo que piensen los demás, pero si que se que no me apetece pasar un curso en el que no paran molestarme. No me apetece ser una como las de Glee, me encanta esa serie, no quiero que me echen un granizado a la cara todos los días. Pero creo que podré sobrevivir. 

Lo que me preocupa ahora a mi es ¿de dónde coño me voy a sacar una falda para la fiesta? Tendré que irme de compras con Ángela, y eso si que me da miedo.

Capítulo 2.


Narrado por Gin.

Primer día de instituto, ese sonido insoportable del despertador que se me mete en la cabeza como un taladro ya esta sonando. Me doy una ducha rápida para despejarme y me pongo el horrendo uniforme, y salgo para las clases con Julia.
Me presenta a Angela la típica chica rubia a la que desean todos los chicos, que es odiosa pero ella resulta ser muy maja, ella también lleva bastante tiempo aqui en el internado, ella forma parte de las animadoras y sale como no con un jugador del equipo de fútbol. Se llama Samuel, le llaman Sam, es rubio con ojos marrones bastante guapo, pero no de mi tipo.
Antes de que suene el timbre, salgo al pasillo a dar una pequeña vuelta necesito estar sola y veo al típico grupo de pijas tontas hablando con sus uniformes de animadoras con ellas veo a un chico moreno, con ojos marrones el típico chico superficial, y asqueroso que intenta liarse con todas y enamorar a todas, pero estaba buenísimo hay que admitirlo, de repente me mira y nerviosa busco cualquier cosa con la que distraerme, no tengo otra cosa que hacer que enamorarme del imbécil de turno.

Suena el timbre. El moreno se sienta delante de mí, y, mientras el profesor empieza a contarnos lo que vamos a hacer durante el curso el moreno se gira hacia mi.

- Hola guapa, ¿eres nueva?
- Lo siento para tí no.
- Relaja máquinilla, eres difícil me gusta es tan...sexy. Dice con una sonrisa irresistible.
*La baba, Gin, la baba*pienso.
- Sabes lo que es sexy también, verte a ti lejos de mi.
- Y por que lejos ¿ no te gustaría estar cerca de mi, en el baño por ejemplo?
- Si, pero para vomitar.
- Jajajaja, eres graciosa guapa, vamos a pasar un buen curso.

Me parece que va a ser imposible que no me empiece a gustar este tío en todo el curso, es tan asquerosamente guapo, y madre mía que cuerpo. *Gin, las hormonas controlalas, controlalas*. pienso de nuevo.

Cuando termina la clase, me acerco a Angela y supongo que por lo popular que es conocerá al moreno, se llama Dani, es el capitán del equipo de fútbol y el novio de Belén, la tipica rubia capitana de las animadoras. Me ha dicho que ha visto lo que hablabamos y que me empezara a sentir guapa para que Dani me tirara los tratos hay que estar bastante buena. 

La verdad es que no entiendo por qué Dani se ha fijado en mi siempre he sido la tipica amiga normalita de la guapa en la que nadie se fija, y siempre fantasea con todos los guapos. Mi cuerpo tampoco es que sea muy bueno, esoty delgada pero podría estarlo mas mi delantera es normal, una 90 como casi todas, y mi culo poco mas de lo mismo. Pero lo que menos quiero ahora es meterme en líos.

Cuando estoy en la taquilla noto un olor provocativo, colonia "One Million" irresistible en chicos que son guapos, por supuesto. Como suponía Dani estaba detrás de mí.
- Hola guapa, me parece que deberíamos presentarnos mejor me llamo Dani ¿tu?
- Ginebra, pero mis amigos me llaman Gin.
- Como la de Tengo Ganas De Ti
- Me extraña que hayas visto esa película
- Por mi novia por supuesto... bueno dejarás que te llame GinTonic 
- La proxima vez que me llames así tendrás mi puño en tu boca
- Vale vale GinTo... digo Gin, pero al menos me dejarás ser tu Hache 
- En tus mejores sueños guapito.
- Bueno he conseguido, que me llames guapito eso es un avance
- Creído, vuelves a estar donde antes
- No por favor voy a llorar...snif snif
- Que imbécil eres, adiós
- Pero no te enfades ven. 
Me coge con la mano por la cintura y me lleva a escasos centrimetros de su boca, menudas confianzas coge este tío, yo mientras tanto intento sobrevivir sin morirme que ojos Dios mío.
- Tienes novia, déjame en paz
- No tiene por que enterarse, además yo no me lío con cualquiera
- Tu tienes pinta de liarte con cualquiera que tenga culo para agarrar y mas de una 90 de talla de sujetador.
Y cojo y me voy, esa ha estado bien, dejar a un tio a medias, tengo que usarlo más.
- Puta GinTonic. 
Oigo al fondo a Dani riéndose, y esto hace que me salga una sonrisa verdadera que hacia unos días no era capaz de salir de mi boca.

Suena el timbre, segunda clase. 

Si esto me pasa en el primer día no quiero imaginar en los nueve meses que me quedan. Y la verdad es que no me imaginaba nada de lo que iba a pasar.

Capítulo 1.


Narrado por Gin.

Suena el pitido del insoportable del despertador, el verano ha terminado empiezan las clases, y no es el mejor año para mi.
Antes de nada tengo 17 años, y debido a mi nivel de inglés mis padres han decidido apuntarme a un internado en Londres, lo mejor de todo es que no conozco a nadie.
El despertador suena a las 7 en punto, y después de desayunar y recoger las maletas mis padres me llevan al internado, en el coche mis padres se despiden de mí. Dicen lo típico que suelen decir los padres portate bien, habla mucho inglés, no hagas locuras... no los voy a ver hasta navidades pero eso no esta tan mal.

Una vez allí me encuentro en uno de los inmensos jardines de la residencia de estudiantes en la que estoy con el que será mi tutor y mi profesor de música, es un hombre muy alto y delgado. 
- Buenos días, Ginebra Fernández ¿verdad? 
- En efecto, y usted ¿es?
- Su tutor y profesor de música Will, encantado
- Igualmente, puede decirme donde está mi habitación quiero instalarme lo antes posible.
- Por supuesto, la 521 su compañera está allí esperandola.
- Gracias, hasta luego.

En el camino a mi habitación me encuentro con todo tipo de chicos, los guapos de club de fútbol con las típicas animadoras, los empollones, los raritos, los normales...la verdad es que me recordaba a mi serie favorita Glee. Y ahí estaba mi habitación la 521 solo pedía que mi compañera fuera normal, y la verdad es que parecío que Dios me escuchó.
Mi compañera se llamaba Julia, era una chica de pelo rizado castaño y ojos azules muy bonitos, bajita pero muy simpatica, es la típica chica perfecta, la verdad esque sus notas son impresionantes.
- Hola tu debes de ser Ginebra ¿no? Yo soy Julia encantada.
- Hola, si lo mismo digo,  pero mis amigos me llaman Gin.
- Eres novata, yo llevo aquí dos años ya.
- Genial así me podrás orientar un poco jajajaja.
- Si, además estamos en la misma clase, la verdad es que la mayoría de mis amigas se han ido este año así que me alegro de que estes aquí. Salimos y te enseño esto.
- Vale.
Julia me enseñó la residencia, la cafeteria, la sala de descanso, y luego fuimos al instituto vimos el gimnasio, el aula de música, el laboratorio, nuestra clase y fuimos a por mi uniforme que es horrendo odio definitivamente los uniformes.
Después bajamos a cenar, la comida no es muy mala hay mucha ensalada y eso me vendrá bien para bajar unos kilos la verdad, en España comía demasiado dulce.
Al subir a la habitación Julia y yo hablamos sobre nosotras Julia me contó que sus padres la enviaron allí hacía dos años porque se lo recomendaron al ser tan buena estudiante, me dijo que echaba mucho de menos a sus hermanos con los que estaba muy unida. 
Me contó que esto estaba muy dividido los populares por un lado, los jugadores, las animadoras, luego estaban los normales, luego los empollones, y así Julia me dijo que yo de momento estaba en el grupo de los normales, la verdad es que no sabía como tomarmelo, supongo que como un halago.
En seguida nos fuimos a dormir a las 7 teníamos que estar en pie, me tumbé en la cama a escuchar música en  mi iPod, pensando en como transcurrirían estos nueve meses que me quedaban en aquel internado, por lo menos ya tenía una amiga y no me sentía tan sola. Solo esperaba que el día siguiente no fuera muy malo. Y la verdad es que no lo fue.